Inversión en exploración minera cerraría el año en negativo, estos son los riesgos

La Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (Snmpe) señala que hasta ahora no se concreta el destrabe de trámites para esa actividad y el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) ve más bien retroceso en la búsqueda de nuevos yacimientos

. Las inversiones en exploración minera sumaron los US$ 303 millones entre enero a setiembre, un ligero incremento de solo 0.3% respecto a similar periodo del año anterior. Aún con este resultado en los primeros nueve meses del 2023, los gremios empresariales ven difícil que a fin de este año alcance el mismo nivel del 2022 (US$ 429 millones).

Ello, a pesar de que el Gobierno peruano anunció diversas medidas para destrabar el gasto de las empresas mineras en la búsqueda de nuevos yacimientos, pues hay otros factores que más bien pueden afectar esa actividad, según expertos del ámbito minero.

Medida a favor

En la última semana, el Ministerio de Energía y Minas (Minem) modificó el Reglamento de Protección Ambiental para Exploración Minera, para que se puedan tramitar en forma simultánea la evaluación del impacto ambiental y permisos para uso del agua para esa actividad, a fin de reducir los plazos para su aprobación.

Esto se suma al anuncio que hiciera el 15 de este mes el ministro de Energía y Minas, Oscar Vera, de que en un mes su sector aprobaría la Ventanilla Única Digital para acelerar los plazos de aprobación de trámites para la exploración minera.

Además, Vera indicó que había en cartera de su sector 70 proyectos de exploración por US$ 521 millones en 16 departamentos, entre los que figuran Picha en Moquegua y Puno; Usicayos, en Puno; Soledad, Los Perdidos II y Umami, en Áncash; y Chacapampa, en Apurímac.

Cuál es la situación de la inversión en el rubro?

Carlos Gálvez, expresidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (Snmpe), consideró que sería difícil que al final de este año se logre incluso alcanzar el nivel del 2022 debido al inicio del periodo de lluvias, que no facilita las actividades exploratorias, condiciones que, estiman se mantendría hasta abril de 2024.

Hace más de una década (entre los años 2012 al 2014), las inversiones en el mencionado rubro oscilaban entre los US$ 600 millones a US$ 900 millones por año, pero en los años siguientes fueron decayendo hasta alcanzar su peores cifras con la pandemia del covid-19, con apenas US$216 millones el año 2020.

Gálvez indicó además que aún está pendiente de que el Minem implemente la anunciada ventanilla única digital para la exploración, aunque según observaron gremios empresariales en el Perumin 36, esa medida sería mas favorable para la ampliación de proyectos mineros en marcha, que nuevos.

Perspectiva

El exviceministro de Minas, Rómulo Mucho, indicó que hay más perspectiva de que las empresas emprendan inversiones para explorar con fines de ampliación de sus actuales minas (proyectos brownfield), que nuevos proyectos (greenfield).

Augusto Cauti, también exviceministro de Minas, consideró que a corto plazo la desaceleración económica, la incertidumbre política y también la caída en los precios de los metales, ocasionaría la disminución de las inversiones en nuevos proyectos mineros, entre ellos los de exploración.

No obstante, Marcial García Schreck, socio de impuestos de EY Perú, consideró que los precios del cobre -por ejemplo- han retrocedido desde sus máximos de US$4.00 la libra que alcanzaron meses atrás, pero aún pueden ser atractivos para la actividad minera, incluida la búsqueda de nuevos yacimientos.

Ello, debido a que su aún alta cotización en bolsa, facilita además el financiamiento para nuevos proyectos exploratorios. Sin embargo, observó que las demoras para la aprobación de la tramitología (que aún se mantienen) para los proyectos de ese tipo, pero también el clima de conflictividad social en el Perú, hacen menos atractivo invertir en ese segmento.

Oposición a la exploración

En las últimas semanas diversos medios especializados han reportado nuevos casos de oposición social a la exploración minera, en algunos casos avalada también por autoridades locales, a pesar de que cuentan con autorización del Gobierno nacional.

En Loreto, por ejemplo, Infobae informó que la Dirección Regional de Energía y Minas de la región anunció que rechazará los pedidos de autorización para exploración minera en la cuenca del río Nanay.

Ello, a pesar de que el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet) otorgó una concesión en 1,000 hectáreas para desarrollar exploración aurífera en la zona. El argumento de funcionarios de dicha dirección, perteneciente al Gobierno Regional de Loreto, -según la información que se dio a conocer en ese medio- es proteger la fuente de agua que abastece a unas 160 mil personas en la zona.

En el distrito de Ascensión, en Huancavelica, autoridades locales expresaron oposición al proyecto exploratorio Pukaqaqa Sur, de la empresa Nexa Resources Perú, aprobado por el Minem, señalando que dejaría sin agua a más de 50 mil personas de esa localidad.

En Ayacucho, autoridades regionales respaldaron la oposición del Frente de Defensa y Desarrollo de Huanta, en contra de la licencia para exploración minera que permite su realización cerca de las lagunas ubicadas en la cuenca alta de la cordillera de Razuhuillca.

Preocupa proyecto del Ejecutivo

Esta situación se produce, a pesar de que, según el director del Instituto de Ingeniero de Minas del Perú, Miguel Cardozo, en los últimos cinco años ha habido un retroceso en las inversiones en exploración minera.

“Entre el 2017 y el 2022, el mundo creció 65% en exploración minera, mientras que nuestro país solo 5%. Eso es causa de las regulaciones que fueron emitidas en el 2017″, anotó el especialista, en referencia al silencio administrativo negativo que se estableció ese año para la regulación ambiental aplicada a esa actividad.

Además, Cardozo mostró preocupación por el proyecto de ley de ordenamiento territorial, que planteó el Gobierno, y que delega en autoridades subnacionales, la planificación para el uso del territorio, y que entró para su debate a las comisiones de Descentralización y de Economía del Parlamento.

Cardozo advirtió que tal ordenamiento territorial sería una “jugada política” que han buscado por mucho tiempo grupos antimineros, “que tratan de generar una discusión absurda e inútil acerca de cómo hay que ordenar el territorio a priori”.

Fuente: Gestión

Facebook Comments